Tarde o temprano los asuntos que no se han resuelto en el pasado vuelven a emerger inesperadamente. Hace más de veinte años, el secuestro en Escocia de una millonaria y su hijo acabó de la peor manera posible: después de la entrega del rescate, a la mujer se la encontró muerta y su hijo desapareció. Ahora, cuando ya casi nadie recuerda el trágico suceso, un periodista reabre la investigación al descubrir una pista que lleva a la Toscana.
A la inspectora Karen Pirie le asignan este desagradable caso frío en un mal momento. Pirie está enfrascada en un feo asunto relacionado con la desaparición de Mick Prentice, un trabajador que había decidido convertirse en esquirol en el apogeo de la huelga de mineros que ha estado sacudiendo al país. Algo muy, muy turbio se esconde tras este caso, que en un principio parecía rutinario.
La habilidad con que McDermid alterna presente y pasado en dos historias paralelas no concede ni un momento de tregua al lector de esta absorbente novela.
Val McDermid (Kirkcaldy, 1955)
Nació y se crio en una pequeña localidad de tradición minera de la costa este de Escocia y actualmente vive a caballo entre Manchester y el condado de Northumberland. Es una de las escritoras de novela de suspense con mayor proyección internacional. Tras estudiar Literatura inglesa en Oxford, ejerció como periodista en diversos periódicos durante más de quince años. Desde que en 1995 ganó el Premio Gold Dagger con la publicación de El canto de las sirenas, abandonó el periodismo y se dedicó en exclusiva a escribir novela de suspense. Sus novelas, centradas sobre todo en los aspectos psicológicos del crimen, son muy apreciadas tanto por la crítica como por sus lectores.