La calle parecía una selva. Alguien frena de golpe. Otro se baja a insultar. Corridas a los bancos, empujones en las filas de pago, el calor que sube en medio del cemento. Los útiles de los niños para el colegio que están cada vez más caros y el dinero que no alcanza. La medicación no se consigue. El médico no atiende. La tensión arterial sube. La ira muestra su sombra...
La casa era la opción de descanso, pero allí había otro campo de batalla. Ella sospecha de infidelidad. El hijo mayor puede estar consumiendo drogas. El más chico quiere abandonar los estudios. Él no soporta el desorden. La explosión emocional es inminente. ¿Quién puede vivir tranquilo? ¿Quién sabe cómo vivir entre la ansiedad y el estrés?
El sistema emocional se desarrolla en base a nuestra forma de pensar y valorar. Es decir, de acuerdo a lo que creemos es lo que sentimos. Por lo cual el objetivo de este libro es enseñar tres reglas puntuales que la terapia cognitiva revela para educar el sistema emocional:
1. Los hechos y acontecimientos de la vida no son responsables de mi forma de sentir, sino que lo que pienso de lo que está aconteciendo, es lo que define mi forma de sentir.
2. Si genero mi malestar, por mi forma de pensar, al cambiar mi forma de pensar puedo dejar de generar emociones perturbadoras como la ansiedad.
3. Todo cambio, cualquiera que fuera, requiere de esfuerzo y constancia.
La casa era la opción de descanso, pero allí había otro campo de batalla. Ella sospecha de infidelidad. El hijo mayor puede estar consumiendo drogas. El más chico quiere abandonar los estudios. Él no soporta el desorden. La explosión emocional es inminente. ¿Quién puede vivir tranquilo? ¿Quién sabe cómo vivir entre la ansiedad y el estrés?
El sistema emocional se desarrolla en base a nuestra forma de pensar y valorar. Es decir, de acuerdo a lo que creemos es lo que sentimos. Por lo cual el objetivo de este libro es enseñar tres reglas puntuales que la terapia cognitiva revela para educar el sistema emocional:
1. Los hechos y acontecimientos de la vida no son responsables de mi forma de sentir, sino que lo que pienso de lo que está aconteciendo, es lo que define mi forma de sentir.
2. Si genero mi malestar, por mi forma de pensar, al cambiar mi forma de pensar puedo dejar de generar emociones perturbadoras como la ansiedad.
3. Todo cambio, cualquiera que fuera, requiere de esfuerzo y constancia.